La medicina en Roma

A partir del siglo I Roma sustituyó a Grecia como centro del saber, la medicina también siguió esta dirección. La medicina romana era esencialmente continuación de la griega, pero los romanos hicieron también notables contribuciones al progreso de la medicina, fundamentalmente tres:

1- La construcción de hospitales militares o “valetudinaria”, que se desarrollaron como respuesta a las necesidades derivadas del crecimiento progresivo de la República y del Imperio. Hubo también un mayor desarrollo de la cirugía principalmente militar, debido a las numerosas heridas producida en los entrenamientos con armas y en las guerras.

2- Las obras de saneamiento de la vía pública, que están representadas por los grandes acueductos, alcantarillas y baños públicos. Los arquitectos romanos construyeron estas obras para evitar infecciones derivadas de aguas estancadas y suciedad. Los principales arquitectos de esta época fueron Varro, Columella y el más representativo Vitruvio, que fue arquitecto con el emperador Augusto.

3- La legislación de la práctica y de la enseñanza médica.

En los primeros tiempos en Roma destacan varios médicos: Asclepíades de Bitinia, con influencias del epicureismo, Heráclides de Tarento y Apolonio de Citio.

Escuelas romanas

Durante el siglo - III la medicina hipocrática se divide en dos escuelas, bastante diferentes entre sí: la escuela dogmática y la escuela empírica.

La primera representa tanto la exageración de la tendencia especulativa de los clásicos como el carácter inflexible de la doctrina. Como reacción nace la escuela empírica, para la cual sólo lo práctico era importante. En el siglo -I se consolidó una tercera corriente, la escuela metódica, basada en el atomismo de Demócrito. Esta fue la escuela más extendida en Roma, sobresale la figura de Celso.

Posteriormente aparecieron en Roma, otras escuelas médicas que llegaron a alcanzar cierta fama: la escuela metódica, la escuela neumática y la escuela ecléctica La escuela metódica fue fundada en la segunda mitad del siglo –I por Temisón de Laodicea. La escuela pneumática fue fundada por Ateneo de Attalia en el siglo I. Aunque seguían siendo humoralistas, asignaban a la acción del aire dentro de cada cuerpo mucha importancia en la génesis de las enfermedades. El pneuma que llegaba a los pulmones se distribuía por las arterias después de alcanzar el corazón. Era un prinicipio vital impulsor cuyo estado se apreciaba en el pulso.

La escuela ecléctica fue fundada por Agatino de Esparta, discípulo de Ateneo de Attalia.